‘Noir’ andaluz a lomos de una tortuga
El director de Techo y comida, Juan Miguel Del Castillo, nos sorprende con La maniobra de la tortuga, cinta que entronca y ensancha lo que podríamos denominar noir andaluz, el género policiaco que películas como Grupo 7 o La isla mínima conforman sin intención de hacerlo pues cada una de ellas es distinta por más que todas compartan características del thriller.
El origen de la cinta está en una novela de Benito Olmo, cuyo título respeta y con el que quizá desoriente al espectador. La trama nos lleva por el día a día del inspector Manuel Bianquetti, excelentemente interpretado por el actor francés Fred Tatien, enorme, en todos los sentidos, herido por la pérdida de su hija y los conflictos que aquello acarreó. Su herida sin cerrar volverá a sangrar con un nuevo caso de asesinato que arrastra la trama y lo arrastra a él por distintos espacios de Cádiz y los alrededores mostrándonos una parte de sus bajos fondos.
El director repite aquí con Natalia de Molina, en un personaje cuya peripecia vital camina en paralelo a la de Bianquetti, vecinos en la ficción, y de cuya relación se nutre una buena parte de la historia rematada por un elenco estupendo con Mona Martínez y Nacho Mateos, entre otros.
Esta nueva obra de Juan Miguel Del Castillo engarza a la perfección el cine de género con la denuncia social pues a la trama detectivesca la nutren diversos casos de abusos y violencias variadas que sufren las mujeres, violentadas doblemente por las trabas e impedimentos que la propia justicia genera en ocasiones. Una estupenda muestra de cine negro, muy personal, distinta a cualquier a otra, que interesará tanto a los amantes del género como a cualquier otro amante del cine en general.
La actriz Natalia de Molina, en el Festival de Málaga.
