La actriz catalana Maria Rodríguez Soto tuvo un embarazo atípico, al ser el gran protagonista de un largometraje presentado en el Festival de Cine de Málaga. La película Els dies que vindran (Los días que vendrán) ha sido dirigida por Carlos Marques-Marcet, que ya sabe lo que es ganar en el certamen malagueño con 10.000 km (2014). Además, el compañero en la película de Maria Rodríguez es su pareja en la vida real, el actor David Verdaguer. De modo que Maria y David se inventan otra pareja para recrear a Vir y Lluís y rodar un embarazo real, el suyo. ¿Se confundirán realidad y ficción? Ella lo aclara.
¿Cómo ha sido el proceso de trabajo en esta película que en ocasiones parece un documental?
Carlos nos propuso hacer una película sobre el proceso de un embarazo, porque resultó que nosotros lo estábamos. Dijimos que ok, pero que la condición que poníamos es que no fuera un reality sobre nosotros. Entonces nos pusimos a crear esta historia y estos personajes. Estuve una semana ensayando con Carlos y David otra, y más tarde ensayamos juntos haciendo improvisaciones, creando antecedentes de los personajes. También te sientes partícipe de algo, que como actor y actriz en cine eso es casi imposible. Por eso hablamos con esa libertad, porque no somos nosotros. Si nos hubiéramos interpretado a nosotros mismos no habríamos llegado tan lejos.
O sea, que no habéis aprovechado la ficción para deciros cosas que sentís como pareja…
Claro (risas), imagínate.
¿Pero ha jugado a favor el hecho de que seáis pareja en la vida real o también tiene sus contras?
Nos ha jugado mucho a favor. David y yo nos conocimos haciendo teatro. Es un mundo donde nos entendemos mucho todos, pero currando desconectamos de nuestra vida. Una vez que yo parí rodamos aún mucho tiempo y volvimos un poco a hacer lo de antes de ser padres. Trabajar con él es maravilloso porque es un tipo divertido y he aprendido mucho porque yo vengo del teatro, es mi primera película. Entre él y Carlos me han enseñado todo.
En la vida real te ocurrió lo mismo que al personaje con el trabajo…
Sí, yo me quedé embarazada y tenía un estreno en el Teatre Nacional. Me trataron muy bien y se hizo. Luego, ya tenía hablado otro proyecto, pero no tenía nada firmado. Llamé al director y le dije que para las funciones ya tendría barriga y que lo tenía que saber porque era una cosa estética e igual al final ya estaría muy cerca del parto. Él me dijo que sí, que le daba un toque diferente, pero que había que hablar con la productora. Al final, no quisieron y la productora me dijo que preferían a alguien que seguro que lo hacia todo del tirón. Como no tenía nada firmado me quedé sin saber qué hacer.
¿Cómo se lleva un rodaje tan largo?
Fueron 50 sesiones a lo largo de año y medio. Empezamos a rodar cuando yo estaba de cuatro meses, pero luego vimos que el principio no colaba porque se me veía la barriga y tuvismo que volver a rodarlo una vez que parí. Cuando vi el vídeo de mis padres era también después.
¿Cómo surgió la idea?
El embarazo fue la causa. Surgió porque yo me quedé embarazada. David estaba ensayando con Carlos en Londres. Vimos el predictor por Skype, entonces el director le dijo que volviera a Barcelona unos días, pero que me dijera si yo quería hacer una película.
Tú eres quien está más expuesta en la película a causa de tu embarazo, ¿te ha costado hacerlo?
No me ha costado porque ha sido todo muy en familia. Carlos es muy amigo nuestro y vecino. Todo se fue haciendo poco a poco y no he sentido pudor. Quizá mi exposición la he sentido cuando la vi por primera vez y dije “wau ¿todo esto he dado?” Aquí hay mucha información, pero estoy muy contenta de cómo está tratada.
David Verdaguer decía que él no se siente como el personaje a pesar del carácter de la película, ¿y tú?
Tampoco, aunque sí es verdad que la diferencia entre David y su personaje es más radical; y yo quizá soy más parecida, pero sí, es verdad que hay cosas que nos diferencian, como esos prontos. Esos momentos al estar embarazada son producto de hormonas. Me siento distinta por la experiencia que he vivido yo y ella. En la película ellos se quedan embarazados cuando han vivido poco tiempos juntos y es un embarazo no deseado. Son puntos de partida distintos que me hacen alejarme del personaje.
¿Se grabó un parto real para la película?
Sí, es un parto real. David y yo dijimos que eso no lo queríamos enseñar, que queríamos tener un parto tranquilo. Entonces, Carlos pensó en preguntar en los hospitales si había algún parto programado y si alguien quería que lo grabase. Y una mujer, que era ya su tercer hijo, dijo que sí.
También la grabación que sale del embarazo es la de tus padres contigo. ¿Había costumbre entonces de hacer esto?
No, pero mis padres era unos hippies que lo hicieron. Todos sus amigos lo hacían también, así que mis amigos y yo tenemos nuestros partos grabados en vídeo..
¿La familia que aparece en la película es también la tuya en la vida real?
Sí, es mi familia. Ellos nunca han hecho nada de cine y teatro, y así que nos metimos en casa y ensayamos un poco. Se les ve muy naturales y sueltos.
¿No es un poco amarga la película por el contexto social de los protagonistas, por el choque de sus diferentes formas de pensar?
Sí, no es amable. Y el final yo lo veo un poco crudo, aunque cada uno que lo ha visto lo percibe de modo diferente.
¿Puede ser un aprendizaje como pareja?
Eso también es verdad, Siempre hablamos de la maternidad como una cosa maravillosa, pero es muy complicada y muy dura en muchos momentos y también está bien que la gente lo vea y se sienta acompañada en estos momentos.
También para la mujer supone un proceso de transformación físico y mental.
Sí, y también social, porque te ubican en otro lado.
¿Ha sido muy difícil para ti el paso del teatro al cine?
Sí, es otro lenguaje totalmente diferente. También como el rodaje ha sido tan largo, puedes aposentar cosas y aprendes desde una técnica. El teatro requiere de una tonicidad externa que no por eso le resta verdad, pero en el cine al principio pensaba que no estoy haciendo nada. Entonces entendí que no tenía tanto que explicar, que ya lo hace la cámara y comprendí que podía jugar con unas cosas que en el teatro no podía hacer. Todo es más íntimo y más suave.
En el Festival de Málaga hay mucha presencia de cine catalán y, aunque no es este el caso, de óperas primas. ¿A qué atribuyes tanta actividad del cine en Cataluña?
Creo que en Cataluña se están poniendo mucho las pilas con el cine, además de autor, se da mucha voz a todo esto. La Academia de Cine Catalán promociona mucho, hay una Escuela de Cine (ESCAC) bastante potente, luego la Universidad Pompeu Fabra saca a gente muy preparada. Sí, estoy contenta en ese sentido. Aunque yo soy nueva en esto del cine.
Tú vienes del teatro, donde también hay mucha actividad.
Hay mucha cantera, Cataluña es un micromundo, nos conocemos todos, hay mucho teatro en las escuelas, en todos los pueblos y el teatro está dentro de la agenda de la gente. Yo empecé en el colegio y ahí me enamoré.
Fotograma de Els dies que vindran
TOP 5 Una película.- Amor, de Michael Haneke Un libro.- El señor de las moscas, de William Golding Una canción.- Suspicions Mind de Elvis Presley Un lugar.- Irlanda Un sueño.- Dar la vuelta al mundo.
Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies
ACEPTAR